Pobladores reclaman una acción efectiva de la policía en Paiján

Paiján. Nadie puede parar la ola de asesinatos en este distrito y en los cercanos como Casa Grande y Chocope. Los pobladores no perciben que el trabajo de la Policía Nacional es efectivo, en consecuencia la sensación de inseguridad es alta en este lugar.

Los malhechores han llegado al colmo de usar a una niña como escudo humano en sus enfrentamientos a balazos. Y recientemente mataron a un niño de 13 años de iniciales J. A. P. P. Y lo abandonaron en los cañaverales.

Además los asaltos no sólo ocurren en las calles, también dentro de los omnibuses, esto no lo denunciarían los choferes porque los dueños de los vehículos también estarían pagando cupos.

La Industria ha recogido varios testimonios de gente que son extorsionados por los delincuentes, pero temen denunciar estos hechos porque los han amenazado de muerte.

En las calles mucha gente no quiere dar un testimonio con su nombre por temor a las represalias de los hampones, pero si piden el cambio de los policías que laboran aquí, reclaman que se implemente el serenazgo municipal, que se trabaje en inteligencia para ubicar y atrapar a los malhechores, entre otras acciones.

¿Cuándo cambió Paiján?

El comerciante Jorge Acuña Rojas considera que la situación de la criminalidad en Paiján cambió desde los años 90 con la aparición de las banda denominadas Los Aponte y Los Nureña.

“Esas bandas dejaron escuela y entre la gente de mal vivir. Antes en el colegio los muchachos competían en deporte, ahora  vemos que hay una competencia por ser apretones o peligroso delincuente y quién mata más”, dijo.

En Paiján cualquier hora es peligrosa. Las bandas se enfrentan a balazos por el dominio de los cupos y cualquier tiro puede impactarle a u  transeúnte. Los asaltos ocurren en cualquier hora del día.

Patrullaje sin resultados

“El patrullaje policial no brinda el resultado que espera la población, no se percibe una intención contundente por perseguir a los delincuentes, por eso es que los altos jefes deben hacer algo.

Faltan policías

Para el agricultor Jhony Gonzáles Caballero en Paiján “se necesitan más policías, más patrulleros y que organicen a la población en juntas vecinales para aportar información que permita capturar a los delincuentes y recuperar las armas de fuego que tienen en su poder”.

En estos dos últimos años, anota Gonzáles, han aumentado la cantidad de asesinatos y eso es grave. Además persisten las denuncias por casos de extorsión.

Mano dura

En opinión del agricultor Martín Vásquez Ortiz, “aquí se necesita mano dura para hacer retroceder a los criminales, a los ladrones y extorsionadores”.
Ya no hay confianza para caminar tranquilamente por las calles de Paiján. En las noches da miedo salir ya que por una miseria los delincuentes te puede herir con un cuchillo, advirtió Vásquez. La Industria